En la última década la disciplina avanzó vertiginosamente en su consolidación como profesión, en la construcción de comunidad académica y en su capacidad para producir conocimiento acumulable. Se destaca la continuidad en la expansión de los programas académicos, la creación de la Asociación Colombiana de Ciencia Política, la celebración de tres congresos y dos encuentros disciplinares, el crecimiento en el número de egresados y el posicionamiento de dos de las revistas en ISI/Scopus. No obstante, este proceso de expansión también ha creado retos en cuanto al sostenimiento de la calidad de la docencia y la ampliación de los espacios laborales. Igualmente, el conocimiento generado es principalmente descriptivo, cualitativo, monográfico y no comparado, lo que muestra que es necesario seguir diversificando las habilidades metodológicas.